Con el escenario del Museo de la Constitución Nacional de Santa Fe, se realizó la primera jornada destinada a mujeres emprendedoras el martes. El  propósito de la actividad fue el de reflexionar acerca de la problemática de género y el empoderamiento de la mujer como emprendedora y empresaria, y a su vez, brindarle a las participantes las  herramientas  necesarias para lograr la profesionalización y sustentabilidad de empresas lideradas por mujeres, atendiendo el contexto social actual. La actividad estuvo enmarcada en la agenda de acciones programadas en el marco del Día de la Mujer en la UNL.
La Jornada fue organizada por la Universidad Nacional del Litoral (UNL) en conjunto con la Asociación Civil Criar, Comunidad de Mujeres Emprendedoras y el Gobierno de la ciudad de Santa Fe. Se sumaron también a la iniciativa, Expresiva, la Incubadora de emprendimientos culturales de Santa Fe y la Fundación Liderazgos y Organizaciones Responsables (Flor).
Estuvieron presentes en la apertura el rector de la UNL Enrique Mammarella; la secretaria de Desarrollo Estratégico y Resiliencia del Gobierno de la Ciudad de Santa Fe, Andrea Valsagna; la directora del Programa de Género de la UNL Adriana Molina, y la presidente de Criar - Comunidad de Mujeres Emprendedoras Cecilia Ribecco. Además, estuvieron presentes los secretarios de Vinculación y Transferencia Tecnológica, Javier Lotterberger, de Extensión Social, Lucila Reyna, de Ciencia y Técnica, Ana Canal, la secretaria de Cultura de la Ciudad de Santa Fe, Patricia Pieragostini, y la presidenta de la Fundación Flor, Andrea Grobocopatel y demás autoridades de la UNL.
“Cuando uno habla de Mujeres Emprendedoras, en realidad define una cualidad que es inherente a las mujeres” expresó el rector. “Quienes venimos del mundo  académico o del trabajo intelectual, siempre hemos sostenido que el trabajo es independencia y entendimos luego que es también independencia económica que prevenga situaciones de violencia y sometimiento”, destacó Mammarella . Y agregó “rápidamente entendimos que debíamos poner en valor este Programa de formación para mujeres emprendedoras. Desde la UNL llevamos adelante una política sostenida de trabajo en emprendedorismo como también en políticas de género pero nos faltaba dar un paso hacia el trabajo colaborativo que uniera esfuerzos en esta dirección de promoción del emprendedorismo desde una mirada de género”.
Valsagna, por su parte, reafirmó el sentido de llevar adelante actividades conjuntas, con una mirada de género, lo cual está en línea con la decisión de la gestión de la ciudad de Santa Fe, de tener políticas de género en todos los ámbitos. Y en ese sentido destacó la importancia de “acompañar a las mujeres para que puedan realizar sus proyectos de vida” y agregó la necesidad de poner en valor “las experiencias de mujeres que han podido llevar adelante su empresa, desarrollar su organización de modo exitoso y haciendo frente a las exigencias que le impone el contexto, como también el trabajo colaborativo de las instituciones”.

Programa de Formación de Mujeres Emprendedoras
Durante la Jornada se presentó el "Programa de formación para mujeres emprendedoras" que se llevará adelante la UNL junto a la Asociación Civil Criar.  Se trata de un programa especialmente pensado para mujeres emprendedoras que busquen fortalecer sus habilidades empresariales y profesionalizar su negocio, a través de herramientas, talleres y espacios de innovación. El programa completo de formación se compone de seis módulos que abordan de modo integral diversos aspectos relativos al mundo empresarial, pero con la particularidad de la mirada de género. La iniciativa se inscribe en el marco del convenio firmado entre la UNL y la Asociación Civil Criar, Comunidad de Mujeres Emprendedoras.
En ese sentido, la directora del Programa de Género de la UNL,  Adriana Molina, destacó el trabajo en equipo “de la UNL, el gobierno de la ciudad de Santa Fe y las organizaciones e instituciones que entienden que el rol de la mujer en el emprendedorismo es fundamental; y resaltó asimismo que “la Formación para Mujeres Emprendedoras era una deuda institucional de la UNL para con tantas mujeres emprendedoras que hace tantos años que vienen haciendo un recorrido”, y agregó: “Atrás de toda mujer emprendedora hay una historia de resiliencia, hay una mujer que decidió cumplir un sueño de desafiar la realidad y superar muchos obstáculos. Como Estado tenemos la obligación y la responsabilidad de darle oportunidades y herramientas para que eso que hacen, lo hagan cada vez mejor”.
Cecilia Ribecco, tomando la voz de Criar, agradeció a la Universidad por “abrir las puertas para llevar adelante la décima edición del Programa de Formación para Mujeres Emprendedoras vinculadas a la UNL y a la ciudad de Santa Fe”, poniendo asimismo de relieve que “la formación brinda todas las herramientas teóricas y prácticas para empoderar a las mujeres emprendedoras, desde una mirada de género, generar nuevos perfiles de liderazgo, construir redes de sostén institucionales para que esas mujeres puedan, el día de mañana ocupar otros lugares de decisión”.

La experiencia de Andrea Grobocopatel
La actividad central de la Jornada giró en torno a la disertación de la economista y empresaria Andrea Grobocopatel, actual presidente y fundadora de la organización Flor (Fundación, Liderazgos y Organizaciones Responsables), así como fundadora de “Los Grobo”, una empresa agronómica y familiar líder. Llegó a ocupar el cargo de Directora de Finanzas y fue miembro de la junta. En todos los espacios que ha co-creado o ha sido parte, ha resignificado y defendido el  espacio de la mujer y el liderazgo femenino, la mirada de género,  el empoderamiento y la inclusión de las mujeres en los espacios de decisión.  A lo largo de su disertación, la reconocida empresaria argentina compartió aprendizajes y experiencias en los temas en los que tiene un camino ya recorrido,  ante las múltiples mujeres que se hicieron presentes en la jornada, promoviendo fundamentalmente la reflexión acerca de la gestión de la diversidad, de una forma responsable.
El trabajo que lidera desde la Fundación Flor, se sustenta tal como lo expuso en las estadísticas que indican el bajo porcentaje de mujeres ocupando puestos en lugares de decisión. “Estamos aca para entre todos cambiar las estadísticas. Tenemos que trabajar desde las políticas públicas, organizaciones, universidades, empresas, todos”, expresó. En ese sentido, destacó  el valor que aporta la diversidad, a través de actividades que promuevan la inserción de mujeres en posiciones de liderazgo, fomenten la inclusión laboral de personas con discapacidad y busquen el surgimiento de líderes responsables.  Destacó la “independencia económica, la pasión por la empresa y la voluntad de emplear a otros o hacer algo que tenga impacto” como los principales motivos que impulsan a las mujeres a emprender. Y expresó: “La mejor inversión es en una misma. Tenemos que entender que las mujeres no tenemos que estar obligadas a elegir entre la profesión,  el estudio o  la familia. Que podemos hacer todo lo que queramos hacer para realizarnos en la vida, que todos esos aspectos pueden convivir perfectamente”. Hizo fundamental hincapié en el trabajo cultural además de las políticas públicas que aborden la perspectiva de género “es importante trabajar con nosotras mismas el modelo de liderazgo que las mujeres podemos llevar adelante, sin  necesidad de imitar el modelo de liderazgo masculino sino encontrar nuestro propio estilo de liderazgo”. Para Grobocopatel, las mujeres en lugares de decisión tienen una inclinación mayor a mirar el entorno, ser más empáticas y estar más preparadas para otro tipo de liderazgo.

Experiencias emprendedoras
La jornada tuvo continuidad con un panel conformado por los testimonios de cuatro emprendedoras locales: Karina Budassi, de HUE (Haceme Un Espacio); Lucila Martínez, de Cerveza Agosto; Mónica Goiriz,de Mónica Goiriz confecciones; e Inés Larriera, de Fundación Hoy por Mañana. Ellas, a partir de cálidos relatos en primera persona, compartieron y pusieron en valor el recorrido que las llevó desde la idea inicial hasta la puesta en marcha y consolidación de sus iniciativas emprendedoras u organizacionales en el ámbito de Santa Fe.  A lo largo de los relatos se pusieron en común aquellos obstáculos y condicionamientos que atravesaron en el camino, vinculados con la condición de género. El espacio de debate se vio enriquecido por la participación de un público conformado por  empresarias y emprendedoras locales.