Con el objetivo de potenciar las posibilidades de los equipos de investigación existentes en la Universidad Nacional del Litoral; de impulsar la generación de conocimiento y la transferencia de los resultados de dichos procesos, 12 grupos de investigación atravesarán un proceso de valorización de conocimiento y serán beneficiados con financiamiento de Capital Semilla. Esta herramienta “se trata de una política institucional que se sostiene en el tiempo y va creciendo; el objetivo es potenciar proyectos que tengan resultados transferibles, es decir, que puedan ser, en un mediano o largo plazo, apropiados por algún actor de la sociedad, ya sea empresas, estado o asociaciones civiles”, aseguró el secretario de Vinculación y Transferencia Tecnológica de la UNL, Javier Lottersberger.

La valorización se genera mediante un aporte económico de $150.000 por proyecto, que se destina a la concreción del mismo. Es importante destacar que, resulten o no beneficiarios del financiamiento, todos los proyectos presentados reciben una devolución y pueden acceder a un informe preliminar de mercado, a información tecnológica y análisis de patentabilidad y seguir en el programa para futuras convocatorias.

El Capital Semilla, del Programa de Valorización del Conocimiento, es una propuesta del Centro para la Transferencia de los Resultados de la Investigación Cetri Litoral. Esta oficina forma parte de la Secretaría de Vinculación y Transferencia Tecnológica de la Universidad Nacional del Litoral.

 

Edición 2019

En la última convocatoria del Capital Semilla, se presentaron 33 proyectos, todos provenientes de grupos de investigación de esta casa de estudios. “Año tras año, cada vez son más los proyectos que apuntan a este tipo de Programas porque cada vez son más los proyectos que tienen resultados transferibles, lo cual habla de una evolución y crecimiento de los grupos de investigación”, afirmó Lottersberger.

La totalidad de proyectos postulados provienen de cinco unidades académicas de la de la UNL: la Facultad de Bioquímica y Ciencias Biológicas (FBCB), la Facultad de Ingeniería Química (FIQ), la Facultad de Ingeniería y Ciencias Hídricas (FICH), la Facultad de Ciencias Veterinarias (FCV) y la Facultad de Ciencias Agrarias (FCA) y del Instituto de Desarrollo Tecnológico para la Industria Química (INTEC). “Cada vez es más amplio el número de unidades académicas que participan, lo cual refleja que cada vez son más los grupos que tienen proyectos con resultados tangibles. Antes estas convocatorias quedaban restringidas a dos o tres facultades, hoy esto cambió radicalmente”, destacó el secretario de Vinculación y Transferencia Tecnológica de la UNL.

Para la selección de los 12 proyectos finalistas, la comisión evaluadora entrevistó a las personas responsables de cada grupo empleando diversos criterios, entre ellos, se tuvo en cuenta la factibilidad y calidad tecnológica; la capacidad técnica del grupo de trabajo, la viabilidad jurídica, las posibilidades de protección intelectual, la viabilidad económica y el grado de desarrollo o avance de la propuesta en relación con la concreción de sus resultados propuestos. En esta ocasión, la comisión evaluadora estuvo integrada por profesionales de diversas disciplinas, vinculados al académico y también del sector productivo.

 

Proyectos seleccionados

Los 12 proyectos de investigación beneficiados, las unidades académicas involucradas e investigadoras/es responsables son:

  • “Vacuna contra Chlamidyatrachomatis” (FBCB), de Carolina Veaute.

  • “Obtención de un ingrediente alimentario funcional compuesto por galacto-oligosacaridos prebióticos, a partir del suero de quesería. Aplicación de tecnologías de membranas, procesos enzimáticos y fermentativos (FIQ – INLAIN), de Caludia Ines Venica.
  • “Determinación de material particulado suspendido como indicador de la calidad de aire exterior” (FBCB), de María Alejandra Canteros.
  • “Quimio sensores selectivos de iones soportados sobre materiales nanoparticulados” (FIQ), de María Nelida Kneeteman.
  • “Nuevo test para la detección de clonalidad en Leucemia Linfcítica Crónica” (FBCB), de Jorge Ramos.
  • “Pilotos automáticos para vehículos autónomos basados en plataformas de hardware abierto” (FICH – Sinc(i)), de Marina Murillo.
  • “Productos fermentados de sorgo tipo firme” (FIQ), de Silvina Drago.

  • “Fortalecimiento de la plataforma de servicios de biología molecular e inmunopatología en pacientes oncológicos” (FBCB), de Enrique Luque.
  • “Plataforma tecnológica para la determinación de la composición de muestras de aceite de cannabis para uso medicinal” (FBCB), de María Silvia Cámara.
  • “Implementación y puesta a punto de los ensayos analíticos para el control de calidad de arenas de fractura hidráulica” (FIQ), de Mirtha Maximino.
  • “Catalizadores industriales de la formulación a la disposición final” (FIQ – INCAPE), de Raúl Comelli.
  • “Valorización de cáscaras de arroz para la obtención de sílice con aplicaciones tecnológicas” (FIQ), de Laura Cornaglia.

 

El Capital Semilla, tiene como principal misión aportar valor a las capacidades de los grupos y a sus resultados de investigación de la Universidad Nacional del Litoral. Se busca principalmente que los distintos equipos de la UNL estén en mejores condiciones para vincularse con empresas y organismos aportando soluciones a diferentes necesidades. “Como becaria doctoral, que recién estoy arrancando en este mundo de la ciencia y la investigación, me parece buenísimo poder trasferir lo que hacemos al medio, a la sociedad y a la comunidad, porque para eso investigamos. Para esto recomiendo que utilicen las herramientas que brinda la Secretaría de Vinculación; nos apoyaron y facilitaron muchas cosas desde el inicio del proyecto”, comentóla investigadora Antonela Garzón.

En este sentido, una de las investigadoras beneficiadas en esta edición, Carolina Veaute comentó: “para nosotras es importante que exista alguien que nos apoye; como investigadoras a veces estamos muy enfocadas en nuestro trabajo de laboratorio y descuidamos todos estos procesos que son fundamentales a la hora de formular un proyecto, de llevarlo adelante y de expresar los resultados. Realmente las capacitaciones y asesoramiento que recibimos, nos brindan otra visión sobre la transcendencia de lo que hacemos y, aveces, también ayuda a planificar los proyectos en función de la aplicación futura; más allá de las ganas que una tenga como investigadora de hacer experimentos en las mesas”.