El pasado 5 de mayo, la UNL y FADU, junto con el CAPSF y el CAD1, sentaron las condiciones para la realización de un Concurso Nacional de Anteproyectos. Fue a través de la firma de un convenio realizada este miércoles. Así, se da inicio al tan ansiado proyecto de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo.

El decano, Esp. Arq. Sergio Cosentino, así lo expresaba: “Es un gran anhelo de la FADU, histórico, y en los últimos años en la comunidad académica hemos ido consolidando la idea de conformar un espacio edilicio como centro de experimentación e innovación para el desarrollo de la arquitectura, la construcción y el diseño. Encontramos la forma de que esta construcción surja de un proceso transparente y colectivo atendiendo a todas las prerrogativas que tiene este tipo de procesos como es un concurso dirigido a todos los arquitectos del país para que puedan participar desde la génesis en este proyecto tan anhelado de la facultad

El proyecto

El centro de Experimentación e Innovación para el Desarrollo de la Arquitectura, la Construcción y el Diseño será un ámbito de desarrollo y trabajo sobre aspectos fundamentales y diversos relativos a la experiencia de lo material (materiales, tecnologías y técnicas); centrado en áreas del conocimiento que puedan mejorar el aprendizaje del diseño y generar un aporte al entorno ambiental, social y productivo de la FADU y su región, conformándose como un referente de innovación e investigación.

En este sentido, el Centro pretende instalar a la experiencia material como un pilar de la enseñanza – aprendizaje en la FADU; lograr un cambio en la relación de la facultad respecto de la producción material; ser usina de investigaciones en el campo de la innovación de materiales, tecnologías y técnicas vinculadas al diseño.

En otras palabras, busca brindar a la comunidad FADU y UNL en general y un ámbito de alta disponibilidad, fértil para la innovación y establecer un puente entre la comunidad FADU y los problemas sociales, ambientales y productivos tanto del entorno inmediato como global, dando lugar a un intercambio fructífero de experiencias y retroalimentación.

Pensar el modelo educativo y espacial que dará forma al Centro supone un desafío fundamental de conformar una Nueva Casa de la FADU, un ámbito altamente integrado a la vida cotidiana de la comunidad FADU y UNL.

Desde el punto de vista arquitectónico se trata de una “Nueva Casa para la FADU”. Del mismo modo que su primer sede estuvo cargada de mística y el traslado a la Ciudad Universitaria supuso una profesionalización, una mejora cualitativa y de recursos, en la que se logró mantener la fuerte característica relacional que es una de las definitorias del ADN personal de la FADU UNL, esta nueva casa tendrá que potenciar esa fuerza relacional que define a la institución.

Esta norma invisible, heredada en parte de tradiciones académicas de larga data, en parte de los propios orígenes de la FADU y en parte de la disponibilidad edilicia al momento de conformar el espacio propio en Ciudad universitaria, ha conformado un espacio FADU de alta especialización teórica.

La Nueva Casa debe proponerse como un ejercicio de imaginación en el que se puedan superar los paradigmas invisibles y se conforme un espacio muy sensible y disponible a estas realidades que hoy tensionan nuestro día a día en relación a la arquitectura.