El Programa de Becas de Iniciación a la Investigación para Estudiantes de Carreras de Grado de la Universidad Nacional del Litoral (UNL), gestionado a través de la Secretaría de Ciencia, Arte y Tecnología, forma parte de su política científica para la formación de recursos humanos y tiene una extensa trayectoria en la institución. Una gran parte de quienes fueron Cientibecarios/as, hoy está desarrollando actividades de investigación en institutos de doble dependencia UNL-CONICET, son docentes de la UNL, dirigen proyectos de investigación y desarrollo, es decir, son investigadores/as formados/as al amparo de una vasta trayectoria iniciada en las Cientibecas.

“Desde hace dos o tres años, me pregunté si me gustaría dedicarme a la investigación y espero que esta experiencia como Cientibecaria me ayude a responder. La investigación es un área que siempre me interesó, que me causó mucha curiosidad. Veremos qué sucede, por el momento, lo estoy disfrutando mucho”, sostuvo Martina Simoré, estudiante de la Facultad de Ciencias Veterinarias (FCV-UNL) y beneficiaria de la beca, edición 2021.

“Investigar es realmente un desafío, es descubrir algo que estaba oculto o que no era muy claro, lo que es apasionante. Buscar formas, caminos y métodos para poder explicar/fundamentar/comprobar algo, a prueba y error, es algo que requiere paciencia, constancia y estudio”, prosiguió Simoré.

 “Investigar refiere a un proceso de indagación ordenado y sistemático sobre alguna temática con el objetivo de realizar avances en el conocimiento existente”, añadió María Florencia Morat, estudiante de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo (FADU-UNL), también beneficiaria de la beca, edición 2021.

Andar el camino científico

Si bien los motivos por los cuales aplicar a una beca son diversos, en ambas estudiantes está presente el acercarse a una cátedra y a grupos de investigación con el interés de comenzar a andar el camino científico. “Me presenté a la Cientibeca por una propuesta que me realizaron mi actual directora, Natalia Gareis, y mi co-directora, Florencia Rey, después de unos meses de compartir salidas y trabajos con un grupo de investigación del cual ellas son parte (soy adscripta en investigación de la cátedra de Biología). Apenas me contaron sobre las Cientibecas y sobre el plan que tenían en marcha, ¡no dudé en inscribirme!”, expresó Simoré.

“Sinceramente, hace unos años atrás desconocía acerca de las Cientibecas, pero a partir de mi incorporación a la cátedra de Urbanismo de la FADU como pasante me contaron de qué se trataba, me incentivaron y me ofrecieron realizarla en el marco de un proyecto CAI+D.  Finalmente, decidí postularme porque es una gran oportunidad para iniciarse en la investigación y creo que, en un mundo en acelerado cambio y desarrollo, juega un papel fundamental para lograr profesionales completos, curiosos, y activos, y a ello me gustaría apuntar en un futuro”, continuó Morat.

Objetos de estudio

“Mi proyecto de investigación se titula “Trazados ferroviarios como espacios públicos en Santa Fe. Logros y dificultades en la apropiación pública y en la relación con la cuadrícula urbana” y se inscribe en el proyecto CAI+D “Procesos de urbanización y configuraciones urbanas en el Aglomerado del Gran Santa Fe (AGSF)”, dirigido por Diego A. Valiente y co-dirigido por Irene Martínez”, expresó Morat.

“El tema surgió a partir de la problemática urbanística que significa la definición del nuevo destino de los terrenos ferroviarios tras el desmantelamiento de gran parte de este sistema de transporte en la década de 1990. En general, el urbanismo se inclinó por considerarlos como “vacancias urbanas” -terrenos relevantes en áreas urbanas cuyo uso caducó y se encuentran “ociosos” y en estado de abandono-, aunque en otros casos adquirieron usos muy variados: redefinición como espacios públicos, cesión a particulares, integración como lotes a manzanas, intentos de reconversión a ferrocarril urbano, entre otros”, aseveró Morat.

“A partir de estas tendencias de reutilización, se pretende investigar qué condiciones de configuración espacial deben cumplirse para que los terrenos de trazados ferroviarios puedan ser integrados como espacios públicos en una ciudad que se organiza y que configura estos espacios dentro las reglas de la cuadrícula. Para que el estudio sea factible, este se centrará en el trazado del FFCC Belgrano que recorre a la ciudad de Santa Fe de este a oeste”, prosiguió Morat.

Por su parte, Simoré  indicó que su plan de trabajo está inmerso dentro de varias investigaciones apuntadas a intentar explicar y fundamentar cómo el estrés (precisamente el cortisol, la "hormona del estrés") tiene consecuencias en todo el proceso reproductivo, específicamente, en la maduración del ovocito y su ovulación en vacas”.

“El objetivo general de este plan de investigación es evaluar los efectos del cortisol sobre el metabolismo lipídico de complejos cumulus-ovocito madurados in vitro y las consecuencias sobre los índices de fertilización en bovinos. En otras palabras, vamos a medir los cambios de lípidos almacenados en las células que forman el folículo y cantidad de receptores del cortisol, entre otros cambios, que se producen frente a distintas concentraciones de cortisol suplementado”, manifestó Simoré.

Sobre el Programa

La UNL incentiva y promueve la formación de jóvenes investigadores a través de su Programa de Becas de Iniciación a la Investigación para Estudiantes de Carreras de Grado, denominado Cientibecas. En la convocatoria 2021, se adjudicaron 150 becas, de las doscientas cuarenta y cinco (245) solicitudes recibidas. Cabe destacar, que  nueve (9) resultaron no admitidas y fueron evaluadas doscientas treinta y seis (236) postulaciones.

Las becas iniciarán el 1 de agosto y tendrán una duración de 15 meses. En lo que refiere a la evaluación, se tuvo especialmente en cuenta las calificaciones obtenidas durante la carrera de grado y otros antecedentes del postulante, así como la calidad y factibilidad del Plan de Trabajo presentado.

Foto Simoré

Foto Morat